Después de cruzar a pie el infernal desierto, al fin había llegado a mi destino. Lo primero que vi fue un gran acuario, lleno de peces de colores. Tan solo me quedaba subir una escalera de cinco peldaños para finalizar mi largo y penoso viaje. Frente a mí revoloteaban pétalos rosas de los dos cerezos, entre los cuales él me había prometido esperarme. «Vamos, vamos», me dije, preguntándome si mi amado habría cumplido su promesa. «¿Y si no está ahí? ¿Qué haré?» sollocé incapaz de moverme, incapaz de susurrar su nombre.
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¡¡¡RETO!!! Con este microrrelato participo en el reto del mes de noviembre, propuesto por Lídia Castro Navàs. Estas son las condiciones:
- Crea un microrrelato o poesía (máx. 100 palabras) inspirándote en la carta.
- En tu creación debe aparecer el dado: acuario.
¡¡Os animo a participar!! Más información aquí.
Qué angustia. ¿Y nos dejas así? ¿Sin saber si sube los peldaños? ¿Sin saber si está ahí su amado o no? Qué mala persona eres jajaja Le dejo a mi imaginación que idealice ese final, ¿vale? ;) Muchas gracias por tu aportación al desafío de este mes. Un abrazo grande :) <3
ResponderEliminarLo que quiero resaltar con esta historia, más que si al final consigue reunirse con el amado, es ese miedo que a veces sentimos cuando creemos estar a punto de lograr algo. ¿Y si todo no es más que una ilusión? ¿Y si al alcanzar la meta no sentimos más que decepción? Muchas gracias a ti, Lídia, por el desafío tan inspirador. Un fuerte abrazo!!
EliminarEstupendo micro que describe la incertidumbre de la protagonista. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Nuria!! Un abrazo!!
EliminarBuenísimo y nos dejas en vilo... muy buen uso de los elementos del reto. Saludos.
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, muchas gracias, Ana. Saludos!!
EliminarEs lo que hace con nosotros el miedo al fracaso. Un miedo que nos inculcan ya en la escuela. Un micro muy acertado.
ResponderEliminarDesgraciadamente, así es. Muchas gracias por tu comentario!!
EliminarNos dejas con ese miedo a fracasar que nos impide avanzar. Estupendo micro, Cristina.
ResponderEliminarUn abrazo!
Qué alegría que te haya gustado. Muchas gracias, María Pilar. Un abrazo!!
EliminarLa situación en la que se encuentra ella abre una puerta a la esperanza, quizá por la simbología que suponen los pétalos que anuncian una posible cercanía a los dos cerezos de la promesa y la alegría multicolor de los peces del acuario que la reciben tras su largo caminar por un horrible desierto. Imagino que este representará la búsqueda de su amor, en principio nada fácil.
ResponderEliminarUn micro muy inspirador. Me ha encantado.
Te invito a pasarte por mi blog y comentar lo que desees.
Saludos
Como bien dices los pétalos de los cerezos y el acuario son símbolos de esperanza y alegría, pero aún así la protagonista no está segura de que el final de su viaje vaya a ser un final feliz y esa duda es la que la paraliza. Te agradezco mucho el comentario, Marcos. Saludos!!
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