Adoración

En el poblado, todos adoraban a su diosa a la que habían representado con la estatua de una mujer sosteniendo una espada.

Cuando llegó un extranjero y les dijo que no creía en su diosa, los habitantes del poblado enfurecieron y uno de ellos le dio muerte con su espada. 

La diosa llorando, atrajo hacia la estatua todas las espadas y los habitantes del poblado, desarmados, comprendieron que no habían obrado bien.

Arrepentidos, enterraron al hombre junto con una punta de flecha de obsidiana, que era la joya más valiosa que poseían, y con ambos enterraron también a la violencia.

****

¡¡¡RETO!!! Con este microrrelato participo en el reto del mes de mayo, propuesto por Lídia Castro Navàs. Estas son las condiciones: 

  1. Crea un microrrelato o poesía (máx. 100 palabras) inspirándote en la carta.
  2. En tu creación debe aparecer el mineral: Punta de flecha de obsidiana

Comentarios

  1. Me encanta, Cristina. "Con ambos enterraron también la violencia". Esa frase vale millones. Ojalá fuera tan sencillo que la humanidad entierre la violencia 😐 Pero esa ya es otra historia.
    Muchas gracias por tu aporte al desafío de este mes. Te espero pronto. Un abrazo.

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    1. Me alegra que te haya gustado la frase final. Sí, por desgracia la humanidad no aprendemos de nuestros errores. Es muy triste, pero esa es la realidad. Muchas gracias por el desafío de escritura tan original que nos has propuesto y ahora mismo me voy a poner a escribir para el desafío de junio. Te agradezco mucho tu comentario, Lídia. Un abrazo!!

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  2. Este micro tiene una lectura más profunda de lo que cabe imaginar. El humano solo aprende a ser mejor a través del derramamiento de sangre; cuando el mal ya está hecho. Y a veces ni con esas.

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    1. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Solo cuando el mal está hecho tratamos de ser mejores, pero desgraciadamente, en muchos casos, con el tiempo se nos olvida y volvemos a las andadas. Como bien dices: "Y a veces ni con esas". Muchas gracias por tu comentario!!

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  3. Muy bueno Cristina, muy simbólico de lo que debería de ser la paz. Me encanta esa diosa que no es guerrera y trae la sensatez a los suyos. Abrazos.

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    1. Qué alegría que te haya gustado, Ana!! Tal y como dices, "la diosa no es guerrera y trae sensatez a los suyos", y lo consigue gracias a que estos la tienen en consideración y desean hacerla feliz. Muchas gracias por tu comentario y un abrazo!!

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